juan guillermo tejeda

EL JUBILADO JUBILOSO

Posted in cotidiano by jgtejeda on octubre 12, 2023

JGT entrevista en La segunda sept 2023

Posted in cotidiano by jgtejeda on octubre 7, 2023

TRABAJO INÚTIL

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 29, 2023

Tótila para Diego

Posted in cotidiano by jgtejeda on May 14, 2020

ASCHENBACH VIAJA

Posted in cotidiano by jgtejeda on agosto 23, 2016

EXONÉRAME, EVELYN

Posted in cotidiano by jgtejeda on junio 10, 2013

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Mira Evelyn, guapa, cuando vino el Golpe, el pronunciamiento que dicen ustedes los de centroderecha, estabas —creo— en Londres estudiando piano con un discípulo de Arrau (algo es algo) mientras tu padre, el tío Fernando al decir de Bachelet, era agregado aéreo o militar o una cosa de esas, que de agregarse siempre se agrega gente al aparato diplomático, y cobraba su sueldo (hasta el día de hoy, vitalicio, como el tuyo, estatal) no como exonerado sino limpiamente del presupuesto fiscal, del dinero de todos los chilenos, etc., etc., para qué seguir. Él había aprendido inglés en sus entrenamientos en Alabama, donde quizá qué cosa más le enseñaron.

Dejaste el piano y tu padre la embajada, enfilando tú hacia la academia católica (que es una forma específica de academia) y él a dirigir la Academia de Guerra de la FACh donde torturaban a la gente de manera horrorosa. Quien pasara por allí podía ver las novedades que los norteamericanos habían recomendado para el cono sur de América y que en Chile se aplicaban con esmero, no fueran a decir que somos flojos: golpes de pies y puños en distintas partes del cuerpo, destrucción de las uñas con objetos punzantes, el “pau de arara” donde el detenido debe abrazar sus piernas y por el espacio que queda debajo de sus rodillas se introduce un palo, aplicación de corriente eléctrica en partes sensibles del cuerpo como genitales, ano, cabeza, lengua, en fin, aplicándose estos procedimientos reglamentarios con el detenido encapuchado y desnudo. Pero el general Matthei, a cargo de estas instalaciones desde diciembre de 1973 hasta 1976 no se percató de nada, en verdad, y así fue haciendo carrera. Hoy figura en un listado de los que si viajan los toman presos por genocidio o algo, cosas del juez Garzón. Vacaciones locales.

En Chile las cosas, en verdad, se habían torcido, la tragedia griega picoteaba el cuerpo herido de esa gente que por tantas razones había creído en Allende: la explotación laboral, la miseria infantil, los niños de población, los cabros a pata pelada que nos daban a los demás niños con zapatos una como envidia selvática porque tenían algo parecido a un calzado natural de su propia piel. Pero sobre todo, y más allá de lo pintoresco, esa pequeña muerte personal y atroz que es la humillación. Humillados por ser pobres, por ser rotos, por ser ateos, por ser de campo, por ser obreros, por ser lavanderas, incluso ustedes los europeos no españoles, humillados por la gente bien por ser alemanes, o italianos, o croatas, de una manera cruel que ahora ya no opera, por suerte.

Así es que los pobres, los humillados, los morenos de bigote negro y cigarrito huidizo salieron a la Alameda y conquistaron la primera mayoría para Salvador Allende Gossens, mierda, con la borrosa y tibia ayuda de algunos de los que, como yo, veníamos de colegios de curas, de ese infierno, y nos daba puntada al pecho ver las micros con la gente colgando mientras otros surcaban la ciudad en sus autos, y nos escandalizaban la miseria o la desnutrición, y es que eran niños desnutridos, guaguas que se morían por no tener leche, y de Allende se reían por el medio litro de leche pero en fin, él les dio ese medio litro. Que si la justicia iba a venir de manos del marxismo o de lo que fuese, no pensábamos entonces en eso. Ideologías más, ideologías menos, lo que uno veía era esa hambre, esos ojos en la calle, la miseria atroz, la maldición y vergüenza de ser chilenos. Pero el discurso allendista no gustaba a todos, y a muchos les resultaba confrontacional, para qué seguir explicando lo que todos sabemos.

Hoy enfrentan ustedes una campaña electoral. Y no dudan, una vez más, en humillar a la gente decente. No ha sido malo este gobierno, yo pienso, ni tan doctrinal, ni tan represivo, y la economía harto bien, pese a la falta de empatía de Piñera con el sentido común de la gente o incluso consigo mismo. Algo no le cuaja. Ustedes tienen como tarea del semestre hundir a Bachelet. No importa que haya que pisotear la honra de tanta gente decente. Desde tu perspectiva, adivino, un exonerado es alguien que, en principio, ha hecho mal las cosas, un ineficiente, un ser residual. Y si encima recibe alguna pensión estatal es eso, y además un corrupto.

No le salió bien al Presidente su gesta, y el último día de su mandato se las vio con un comunicado o bando o cosa de la autodenominada Junta de Gobierno, que lo destituía por motivos diversos, todos muy severos y ácidos. Fue él el primero en quedarse sin trabajo, y a mucha honra. Un saludo desde aquí para él, primer exonerado de la república.

Allende era un marxista, un admirador de Fidel, un Presidente al que no le salían bien las cosas, pero también un republicano, un parlamentarista, un hombre de derecho, y a él no le venían ni siquiera las cuatro ramas de las Fuerzas Armadas a destituirlo, antes muerto. Por lo que decidió resistir. Y tú en Londres, con Beethoven y Schumann.

De tal manera que el intrépido general Leigh ordenó a sus Hawker-Hunter bombardear el Palacio de La Moneda, y dentro estaba el Presidente resistiendo con sus allegados, no muchos. La guardia de Palacio se retiró majestuosamente. Allende mostró su lado luchador, y se batió balazo a balazo, muerto a muerto. Cuando se vio perdido ordenó a quienes le acompañaban que abandonaran el edificio, y los despidió a cada uno dándoles la mano. Con su casco de combate, regresó a su escritorio, cerró la puerta, cogió el rifle ametralladora que alguna vez le había regalado Fidel, y poniéndoselo entre las piernas disparó dentro de su boca. El cráneo le saltó hecho pedazos y la masa encefálica se desparramó manchando las paredes y los tapices franceses que se habían colocado allí en otro tiempo.

Se sucedían los bandos de la Junta, que eran espantosos. En uno de ellos se declaraba el estado de sitio en todo el territorio nacional, que en buen chileno quiere decir que si te vienen a buscar y te fusilan no hay mucho que agregar. Tarea para los militares de uniforme y brazalete blanco con estampados que cambiaban cada día, la de rastrear extremistas, comunistas, socialistas, marxistas y en general cualquier cosa terminada en ista, lo que nuestros uniformados cumplieron con entusiasmo. Mientras, los vecinos callaban. Aprendimos tantas cosas en esos días.

En otro decreto o bando se declaraban desiertos todos los puestos de trabajo de las jefaturas de servicio de todo el territorio nacional, o sea varios miles de exonerados, cosa nimia en comparación del compadre al que le estaban sacando los dientes con un alicates en el sur, o le machacaban las manos con las botas en el Estadio Nacional. Exonerados también los ministros, que fueron a dar en gran número a Isla Dawson, donde hace más frío incluso que en Londres. Entretanto y sin saber cómo, quizá por efecto del estado de sitio, se clausuró el Congreso Nacional completo, con toda su democracia, sus elecciones, sus diputados, sus senadores.

Un cartel tipo Jesse James ponía precio a la cabeza de Oscar Guillermo Garretón, Luis Corvalán, Clodomiro Almeyda, Jaime Gazmuri, Carlos Altamirano y otros dirigentes. Un nuevo decreto con fuerza, era que no, de ley, disolvió todas las municipalidades, lo que significa calculadora en mano unos treinta mil concejales o alcaldes a la calle, exonerados, y a ver si a la hora del toque venían además a buscarlos, es decir a los de izquierda porque la vida, para los otros, empezó a tener una suavidad, una levedad muy graciosa.

Otro de los bandos de la Junta dispuso que sólo podrían circular los diarios El Mercurio y La Tercera, con lo que se entendía, se especificaba allí, que todos los demás se clausuraban. ¡Cuánto exonerado adicional!

Así empezaron las exoneraciones, que eran en verdad la cosa menor, porque mucho peor fue lo demás, las ejecuciones, torturas, exilios y demás. Las cifras de la represión de la dictadura que ninguna vergüenza le da hoy a quienes, como tú, la han defendido son algo así como 28 mil torturados, más de dos mil de ellos ejecutados y sobre mil doscientos detenidos desaparecidos, una figura novedosa en la historia del sufrimiento humano. Además unas 200 mil personas han sufrido el exilio. ¿Cuántos son los que en este horror habrán perdido su trabajo? ¿Es preciso pedir, como sostiene la Contraloría, un contrato de trabajo en todos los casos? ¿Y los que se sintieron amenazados? ¿Los que pituteaban?

Pero no se trata hoy coyunturalmente de estos temas en los que siempre la gente de la centroextremoderecha ha querido dar vuelta la página, sino de revivir el exoneramiento porque ahí se le puede rebañar algo a Michelle. La opinión más facha y en crecimiento del país sostiene que los políticos son una mierda y la izquierda es lo mismo pero el doble, y lo que conviene es dejarlo todo en manos de empresarios y militares, de banqueros, en fin, de esa gente con buen cutis.

El problema que tienen se llama Bachelet. Por alguna razón esta dama, hija de un general de la Fuerza Aérea que murió torturado, llegó a ser Presidenta de Chile. Y quiere serlo otra vez, sus razones tendrá. Longueira y Allamand también quieren cada uno de ellos convertirse en jefes del Estado, con todo derecho, y se percatan con horror a cada encuesta de que Bachelet les gana lejos.

Allamand, un buen chico de corazón democrático con huesos pinochetistas que defendió mucho al indefendible dictador en el plebiscito aunque dice que va a votar siempre para democratizar el sistema pero al final a él mismo le explosiona o implosiona su propio sistema convirtiéndose en un partido de rugby con efectos especiales adquiridos de su última gira por los Estados Unidos y resultado práctico cero.

Longueira es un loco carismático que tuvo el mayor índice de visitas por semana a Londres a ver a Pinochet en Virginia Waters, o sea no flaqueó jamás cuando todos los demás se iban ladeando un poquito, y eso gusta. Promete un Chile más justo, y siendo acólito del dictador más injusto que jamás hayamos tenido, uno siente como un swing interior.

Pero los méritos de estos jóvenes quedan eclipsados por la personalidad o la leyenda bacheletiana. De tal manera que se trata no ya de ganar la presidencia sino de hundir a Michelle. Y lo ensayan todo, es feroz ver el ballet conjuntado y melodioso de los argumentos radiofónicos, televisivos, parlamentarios, noticiosos y de lo que venga, todo está como programado y pauteado. Escupos. Acusaciones. Campañas raras. Artículos retorcidos. Y uno, que es perezoso y no cree quizá demasiado en Bachelet, comienza a interesarse por ella. ¿Por qué tanto encono?

Y claro, ella es sumamente exonerada, de una familia de exonerados, de un partido socialista escalonista espantoso de gente escasamente cool y generosamente exonerada, y Michelle anda buscando nadie sabe por qué el apoyo comunista, un partido donde la matanza y la tortura y el exilio y también, por qué no, la exoneración, fueron notables. De tal manera que se han dedicado esas mentes estratégicas de la derecha o centroderecha o extremoderecha a encontrar o producir basura en las reparaciones tardías y torpes que este país ha dado a los humillados por la dictadura.

¿Sabes Evelyn lo que es tener, como yo, una madre torturada e internada durante meses en un campo de concentración? Campo de concentración, como en las películas de los nazis, pero aquí, cerca de Santiago. Con todo tipo de instalaciones. Resorts de la indignidad humana. Alambradas, salas de interrogatorio, cajas de castigo, somieres eléctricos. Mi madre salió de ese infierno y murió mucho después, a los 86 años, disfrutando de una jubilación ridícula y de una atención médica vergonzosa por Fonasa, después de haber hecho imposiciones toda su vida.

Y yo por eso defiendo a cada exonerado, y me asquea ese nombre porque es como si quisieran etiquetar a los más débiles. Mi madre no quería que se supiera su desventura en la Academia de Guerra de tu padre, ni en Londres 38, ni en Tres Álamos, ni en Cuatro Álamos, y logró salir de esas atrocidades.

Y digo yo, que si ahora aparecen unos exonerados dudosos, con sus formularios de miserias y abusos recibidos no del todo bien cumplimentados según criterios de la Contraloría, para mí que es culpa de los exoneradores, jamás de los exonerados. Baldón y pecado y remordimiento de tu gente, de tus generales, de tu Academia de Guerra, de esa cultura del exterminio y de falta integral de valores humanos.

Pero no son ustedes los que pagan hoy monetariamente estas reparaciones. Paga el país por la chambonada de la derecha. Pagan incluso con el IVA los propios exonerados, los familiares de los desparecidos, de los torturados. Y ustedes, encima, ahora reclaman y se indignan. Frescos hay en todas partes, si no pregúntenle a la familia Pinochet, que del banco Riggs nunca más se supo, exonérame esa. Sí, que se castigue, en fin, a los aprovechadores. Pero que no se perdone jamás, y que se levante un anti monumento de luz negra y murciélagos eternos a todos los que tienen su felicidad construida sobre la angustia y el sufrimiento de sus conciudadanos.

Te presentaste a las primeras elecciones de la democracia con unos cartelitos bien diseñados que decían: “Te quiero representar”. Princesa de la dictadura, reina de la democracia. Es lo que yo digo admirativamente, cómo hace cierta gente para que le toque siempre la parte del bistec sin nervio. No soy ningún desfavorecido, para nada. Pero lo que le hicieron a mi madre no tiene nombre. Y a esos perros que la detuvieron y torturaron en 1974, entre ellos el guatón Romo instalado con sus secuaces quince días en la casa de mi mamá esperando a ver quien llamaba o quien venía para llevárselo, incluida la nana de la casa, asquerosos, los voy odiar mientras viva.

Exonerados. Los que creyeron en algo. Los que habían ganado un cargo por méritos, por votos. Los que debieron marcharse del país amenazados. Sus esposas. Sus hijas. Toda esa gente destruida y apaleada que había creído en un Chile menos indigno. Familias en el vacío de otros países extraños, que parece muy bonito pero es espantoso. Mis compañeros de universidad, una generación entera diezmada, una horda de mentes creativas que se fue o se sumergió para dejarle el país a la Patricia Maldonado y a los caracoles y a las ridículas plantaciones de kiwi.

Hoy enfrentan ustedes una campaña electoral. Y no dudan, una vez más, en humillar a la gente decente. No ha sido malo este gobierno, yo pienso, ni tan doctrinal, ni tan represivo, y la economía harto bien, pese a la falta de empatía de Piñera con el sentido común de la gente o incluso consigo mismo. Algo no le cuaja. Ustedes tienen como tarea del semestre hundir a Bachelet. No importa que haya que pisotear la honra de tanta gente decente.

Desde tu perspectiva, adivino, un exonerado es alguien que, en principio, ha hecho mal las cosas, un ineficiente, un ser residual. Y si encima recibe alguna pensión estatal es eso, y además un corrupto. Bien, bien.

Pues sabes qué te digo, que prefiero la más indigna de las exoneraciones a tu pureza infernal, y que son mejores mis peores pecados que tus mejores virtudes. No soy nada, lo sé. Pero más respeto con mi gente, con mis muertos, con mis caídos, con mis dolores. Más respeto.

GO TO DUNKELBERLIN

Posted in cotidiano by jgtejeda on May 8, 2013

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Posted in cotidiano by jgtejeda on marzo 19, 2013

VORKURS

Posted in cotidiano by jgtejeda on marzo 9, 2013

DUNKEL

Posted in cotidiano by jgtejeda on septiembre 22, 2012

LAS 3 MARÍAS Y LAS 3 CHEPAS

Posted in cotidiano by jgtejeda on agosto 2, 2012

comer > comer mal
trabajar > trabajar mal
querer > querer mal

en mi modesto caso, sin interés para nadie, pasé la mitad de mi vida comiendo mal y en barcelona aprendí a comer bien, sobre todo con la c. respecto del trabajo, he tenido la suerte, por ser hijo de mi padre, de trabajar casi siempre a gusto y muchas veces con un buen resultado para los demás, o sea que he trabajado en general bien; ahora, de querer he querido a lo perro, o sea no muy bien yo creo, un poco ansioso todo el tiempo

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LA MUERTE SE RÍE DE TI, VIDA

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 29, 2012

si te pierdo, vida, pierdo algo
que sólo los idiotas quieren
conservar:
un soplo apenas
servil a los aires del cielo
que van deteriorando esta habitación
donde te proteges
afligida mientras las horas pasan: en realidad
la muerte se ríe de tí
para ella trabajas
huyéndole
y corriendo sin embargo tras ella
no eres noble
porque todas las comodidades
que logras se nutren
de bajeza
ni valiente en absoluto
cuando temes a la suave y tierna punta
de un pobre gusano
lo mejor de tí, vida, es el dormir
que a menudo buscas
y sin embargo temes groseramente
tu muerte, que no es otra cosa que
dormirse
sólo existes gracias a unos cuantos
miles de granos
salidos del polvo
no eres dichosa
porque lo que no tienes tratas de tenerlo
y de lo que tienes te olvidas
eres incierta
porque tu complexión se altera
en efectos extraños bajo el influjo lunar
cuando eres rica te haces pobre
porque, como un burro que dobla el espinazo
bajo el peso de los lingotes,
acarreas tus pesadas riquezas
en un viaje de ida
hasta que la muerte te libera de la carga
amigos no tienes ninguno
porque desde tus propias tripas, que te obedecen,
el flujo de tus riñones
hace cursar la gota, el eczema y el reuma
que acabarán contigo poco a poco
ni juventud
ni vejez tienes
pues como si durmieras la siesta después de almuerzo
sueñas con ambas:
tu bendita juventud se hace añosa
y mendiga las limosnas
de la vejez paralítica
y cuando eres vieja y rica
no tienes ya calor, ni afecto,
ni fuerza
ni belleza

(shakesp., medida por medida, trad. hoy artesanalmente x bloom, astrana marín, google y un servidor)

ROSADO DE BANDOL (Y VIII)

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 24, 2012

esto lo pone arcadi espada en su blog de verano, que allá están en eso mientras se les abre la tierra —- He escrito alguna vez que la melancolía de los libros de viaje de Gaziel es una de las razones de su atractivo infinito. Gaziel viaja a los lugares y ve y cuenta lo que ya no está. La melancolía llega a su apogeo, casi manierista, cuando lo que se describe en los lugares es él mismo. Que ya no está. No porque no haya llegado, sino porque ya se ha ido. Muchas de las escenas de esos libros acaban con el viejo Gaziel diciendo aquí no volveré más. Creo recordar que en alguno de ellos incluye una cierta teorización sobre el asunto: dice que hay un momento en la vida de un hombre en que todos los viajes que hace son los últimos viajes.

La pregunta que me hago, con las maletas ya en la puerta de la casa de madame Engrand, es si, en realidad, alguna vez se vuelve. Hace un par de días escribió Capel un post sobre las decepciones. Volvió a comer una Sacher en Viena, después de muchos años. La encontró reseca. Se asombra. Y se extraña, porque, dice, la sacher siempre es la misma, con los mismos ingredientes y los mismos volúmenes milimetrados. Sí, la tarta sí.

Él no.

La tarta está reseca porque la memoria fue macerándola y la llevó hasta alturas míticas: el descenso a la realidad es vertiginoso y brutal, y vulgar. En aquella tarta estaban además gentes y cosas que han desaparecido o se han transformado: ese líquido se evaporó y es perfectamente explicable que la tarta esté reseca. Pero sobre todo está aquel que probó por vez primera la tarta y este otro que ilusoriamente cree que reincide.

Nunca se vuelve.

ALEGRES LLAGAS

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 22, 2012

Para mí que el afecto realizado o vivo, al que podemos llamar amor, también amistad, cariño, etc., supone tres cosas, eso voy aprendiendo a través de mis alegres llagas: una afinidad profunda, disponibilidad, y una actitud de respeto.

No podemos inventarnos (tampoco negar artificialmente) relaciones o afectos, es preciso esperar a que entre otra persona y uno brote esa cercanía o corriente natural a la que llamamos afinidad, o también enganche emocional profundo, una familiaridad o pasado individual que de pronto aparece milagrosamente como compartido, o complementario. Son escasas en la vida estas afinidades, pero están ahí, y son parte de nuestra identidad, de lo que somos.

La disponibilidad personal puede parecer algo menor, pero en verdad muchos afectos muy bonitos no logran desarrollarse o dar frutos debido a que uno de los implicados ha asumido ya algunos o muchos compromisos, o debe marcharse a otro lugar, o no le conviene por alguna razón, o pertenece a un medio muy distinto, o siente ambivalencias, o tiene miedo de su propia corriente amorosa, o ha experimentado anteriormente sufrimientos en situaciones similares,  etc. Alguien que en un tiempo tiene mucha disponibilidad puede tener menos en otro momento. El miedo profundo a ser abandonados o maltratados por alguien a quien nos entregamos suele ser motivo para que muchas veces no estemos disponibles..

Por lo que se refiere al respeto, se trata de un movimiento, de una actitud de no estar ni muy distanciado ni muy pegado, aunque sí cerca. El respeto depende de la mirada atenta hacia la otra persona (no la mirada penetrante o invasora) y pasa por  considerarlo en su condición de ser vivo y autónomo, guardando las debidas distancias. Se opone tanto a las lejanías de la burla, el desprecio, la descalificación, el etiquetado, el abandono, la expulsión, la omnipotencia, etc., como en sentido opuesto a la posesión, la dominación, la violencia, el insulto, el sofoco, la demanda imperiosa, etc., zona de control donde se suprime por la fuerza la distancia y la fusión resulta destructora. El respeto mantiene la plena identidad de ambos y precisamente por no empequeñecer uno al otro, por mantenerse cada cual en sus magnitudes y florecimientos naturales, tiene como premio el libre flujo del afecto y la creatividad en ambos sentidos del afecto, dar y recibir sin obligar. Aunque en el amor hay zonas o tiempos de fusión, esa proximidad máxima supone respeto, es decir la plena libertad de ambos para restablecer y graduar las distancias, para seguir mirándose.

Estos tres factores de lo amoroso están en permanente fluctuación, toda vez que somos seres orgánicos, cambiantes y limitados, con múltiples facetas que desarrollamos continuamente. Y además, a menudo, bastante ineptos. (…..lectura de El respeto o la mirada atenta, de Josep María Esquirol)

RICARDO III

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 16, 2012

y ahora
el invierno de nuestro descontento
se ha vuelto verano glorioso
bajo este sol de York
todas las nubes que pesaban sobre nuestra casa
están sepultadas
en lo más profundo del océano

van ceñidas nuestras frentes
de guirnaldas victoriosas
nuestras armas abolladas cuelgan de los monumentos
y las tensas llamadas de alarma
se han convertido en reuniones alegres
las marchas temibles
en compases de deleite

el guerrero de rostro adusto
ha relajado su rugosa frente
y ahora, en lugar de montar corceles con púas
para aterrorizar el alma de sus adversarios miedosos
corcovea ágil por la habitación
de alguna dama
bajo el sonido lascivo del laúd

pero yo, que carezco
de la debida silueta
para practicar estos deportes
o para seducir a un amoroso espejo
yo, groseramente estampado
y hambriento de la majestad amorosa
que uno necesita para pavonearse
ante una deseosa ninfa en movimiento
yo, privado de toda bella proporción
estafado por la naturaleza hipócrita
deforme, inconcluso, enviado
antes de mi tiempo
a este mundo jadeante
terminado a medias
tan penosamente y sin estilo
que los perros me ladran cuando me paro ante ellos
ay yo, en este debilitado tiempo de paz
no tengo deleite alguno
en qué pasar el tiempo
salvo el de espiar mi sombra bajo el sol
y comentar mi propia deformidad

y por eso, incapaz de mostrar
que soy amante
para entretenerme en estos días bien hablados
estoy decidido a mostrar
que soy malvado
odiando los placeres ociosos de estos días
he urdido complots, peligrosas inducciones
profecías borrachas, libelos, sueños
a fin de arrojar a mi hermano Clarence y al rey
en odio a muerte el uno
contra el otro
y si el rey Eduardo es tan verdadero y justo
como soy yo sutil, falso y traicionero
Clarence deberá ser hoy
estrechamente aprisionado
a causa de una profecía que dice que
J será el asesino de los hijos de Eduardo
sumergiros, pensamientos, en el fondo de mi alma!
que aquí viene Clarence…

(recién traducida, me ayudé de Astrana Marín, que sin ser muy poeta es acucioso, y de google translator of course)

TENER Y SER

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 14, 2012


ohhhhh
para tener
es preciso estar
dispuesto a perder
a perderlo todo
volver a empezar
porque de otro modo
lo que se consigue
no es tener y ser
sino retener
más que respirar
apenas subsistir
en vez de vivir
eso es programar
dentro del incendio
que es estar aquí
en esta existencia
frágil y
mortal

PEPE EDWARDS

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 13, 2012

Hoy renace Pepe Edwards, un saludo para él, para la Choquita, para toda su tribu (foto de Juan Tejeda).

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AIRE DE INVIERNO

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 12, 2012

y yo
que estoy apartado
bebiendo a solas media botella
de vino espumoso, que le dicen cava
o champán, es igual
en la noche fría
junto a la cordillera
escuchando a dylan
apartado
de lo social
apenas relacionándome
cada día
y gozando cada emoción
disfrutando de la limpieza de cutis
de quien no tiene nada más
que lo que tiene
soy dueño, lo sé, de mi pobreza
y de mis riquezas,
del disfrute
y del regalo
mis estanterías están llenas
de cosas diversas
que cada tarde se hacen y deshacen
y conozco los pasajes
que conducen al sueño
al deleite, a la sonrisa,
al descubrimiento
y espero paciente, impaciente,
inquieto, quieto
espero
a quienes quieran de mi miel
y tengan la disposición, el tiempo,
el cuidado,
la cosa necesaria,
que estoy en sazón
haciéndome cada día
encontrando mis formas
geométricas y orgánicas
aunque sienta, no puedo negarlo,
la mordida de la edad en mis tobillos,
yo sigo el aura, sigo al día
y es un regalo el pasaje de
whitman que me lee j
dedicado, por cierto, a sus
retozos junto al tres
junto al son,
bajo las antiguas estrellas
del norte
donde ahora es verano
dylan es la violeta parra de los gringos
me avisa él
y yo lo quiero
y gozo de las gotas de humedad
que se escurren por el ventanal
que aquí es invierno
y mis pies acarician, oh tristeza y dicha,
la bolsa de agua caliente bajo la cama
mientras el tiempo pasa
cumpliendo su guadañosa misión
y llama la voz de nel, voz de miel y acero
y converso con lep, que me alimenta con su
humanidad
y pasan por mi ventanilla rostros
fugaces inolvidables de personas, tantas, sin que
logre descansar definitivamente en ninguna
salvo a instantes,
que cada gesto y sonrisa y silencio
me hacen ser más lo que soy
un bordado de hilos de colores
un canasto de mimbres cruzados
y se olvidan poco a poco los mails
se borran los mensajes de texto
desaparecen los posteos
se desvanecen o se rehacen las voces
y por mis pulmones corre
gracias a quienes están conmigo
el aire del invierno
mientras mis primas
bajo el sauce infinito de la infancia
de mi familia deshecha
me acarician con sus pupilas
cercanas
y yo no puedo sino esperar
que se cumpla el tiempo
en que la curva de la soledad
y del respeto herido
trace su limpia trayectoria
hasta encontrar otra vez
las cosas
su natural disposición
para que cada cual
de nosotros
sea lo que quiera ser
y acepte su propio deseo
inconcluso y confuso
sin neblinas ni ahogos
para que la vida se muera y
la muerte reviva, que ese es
el mambo atroz de la naturaleza infinita
y aquí estoy
limpio y rasmillado
juvenil envejecido
entusiasta siempre
no sé por qué razón
flanqueado por shakespeare, lo siento
alimentado shakespeare por el canon de bloom
al que j llama «el libro»
que no hay otro
y vuelan las mañanas
se van las tardes
se oscurecen las noches
y yo estoy aquí
entero
haciéndome
como un oso polar en el deshielo
como un árbol
del desierto
como un mármol
barroco
sin sentir ya nada
en la piel
sino la dicha
profunda
de existir

NO SEAS FELIZ POR FAVOR

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 7, 2012

quienes nada te quieren
quieren que estés siempre bien
entendiendo por bien no causar problemas
a los demás
y de esa manera
buscando tú, para complacer a esas hienas,
la sonrisa perfecta en todo momento
la paz de pareja y de familia
la sensatez laboral
la solvencia económica
la delgadez de cintura, el rostro sano
esmerándote mucho
harás coincidir finalmente todos los puntos posibles
de tu substancia, de tu galaxia
en una neutralidad solitaria y vacía,
esa felicidad con la que quieren destruirte
a tí y a tu riqueza
porque tu plenitud es la plenitud de tu corazón palpitante
el orden de tu desorden sucesivo
la lluvia y el granizo de invierno, el sudor del verano,
la rabia, la tristeza, la pena, el goce, la calma
el aburrimiento, el dolor del cuerpo
el desasosiego y la siesta, el equilibrio
la soledad, la caída
incluso el no sentir, por el momento, nada
cada estado con su resplandeciente hermosura y energía
llenando sucesivamente tus entrañas humanas
en ese mercado libre de los ánimos
del que estás hecho
y a eso estás llamado en esta tierra
a habitar las fiestas y los dolores de tu vida
no a esconderlos bajo el asfalto
o en la boba sonrisa feliz
de lo que está muerto
entierra tu cabeza en el error
que de otro modo no saldrás de él
déjate ser hasta dejar de ser
busca los espacios vacíos
no aceptes etiquetas
recoge el dulce amargo aroma de tus poros
cuida tus tristezas, que son tuyas
acepta tus moléculas más raras
discúlpate si hace falta
que nada pierdes dejando de adherirte por un rato
a uno de tus muchos gestos
en la disculpa aparece siempre el otro
con su propia galaxia
acepta tus andrajos luminosos
y concédeles su espacio natural
cuida de cada una de las múltiples personas que eres
porque así verás el color de las entrañas de los otros
eres una multitud, y sólo siendo
esa multitud de diferencias que ya eres
alcanzarás el descanso, la gloria,
la unidad
para eso corre la sangre por tus venas
cada instante es el mejor
tal como viene
y se va
disparado finalmente
hacia la nada,
nuestra
madre

_______ y por cierto: http://www.tumblr.com/blog/dunkelberlin

INQUIETUD DE ESTACIÓN

Posted in cotidiano by jgtejeda on julio 6, 2012

…es que yo, cuando viajo, no sé quién soy. Es lo que llamo la «inquietud de estación» esta inquietud de llegada y partida, en que la gente lo va llevando, arrastrando de un lado a otro, y uno, aturdido, responde maquinalmente y se deja llevar, ausente de todo lo que le rodea. Hay personas que tienen permanentemente esta «inquietud de estación», que llegan, saludan, hablan como si estuvieran siempre apurados. Yo tenía un amigo así y por esto lo tuve que perder; pero verdaderamente no era posible tener un amigo que siempre estaba de partida o de llegada ____ Federico García Lorca

y por cierto: http://dunkelberlin.tumblr.com/