juan guillermo tejeda

LA ROCHEFOUCAULD 2

Posted in normal by jgtejeda on junio 26, 2008

Hay gentes que no se hubieran enamorado jamás, de no haber oído hablar del amor.

Los griegos no tienen una palabra para lo que hoy entedemos como amor. Ellos tenían la filía (que es un cariño amistoso, una afición), o el eros (la atracción sexual). El amor es un invento probablemente medieval, un saco que contiene sólo bondades y ninguna maldad hacia el otro, y que además posee rasgos de incondicionalidad, eternidad, etc. Los más grandes propagandistas del amor son los curas y monjas, que han renunciado a él. El amor, así, resulta abrumador. Pero al mismo tiempo nos atrae, como nos puede atraer el paraíso, y tratamos de estar a la altura. Nos enamoramos para participar de esas dichas prometidas (que jamás se cumplen). Por otra parte, y al margen de lo que señala nuestro autor de máximas, el enamoramiento es un impulso animal que por un tiempo limitado pone a la pasión por encima de la razón, con el objetivo de salvar las diferencias y distancias que hay de un cuerpo a otro. Sin enamoramiento es difícil la cópula integral con la que se inauguran muchas sociedades amorosas.

Una respuesta

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  1. miguel said, on junio 27, 2008 at 2:34 am

    sugiero una visita a «El amor y occidente», de Denis de Rougemont.


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